La semana pasada conté protestas articuladas desde las mujeres, ante la falta de escucha sobre su condición y la limitadísima importancia que los gobiernos, especialmente los de Morena, no les dan.
La medicina puede ser sexista. Así lo comprobó Jazmín González Cruz a sus 34 años cuando sospechó que, al igual que su hijo recién diagnosticado, ella vivía con trastornos del espectro autista (TEA).
Hoy que se exige se prevenga y se castigue, hay más represalias contra las mujeres. Los machos que odian a las mujeres, lo piensan, lo planean y lo llevan a cabo.
Desde el Ejecutivo Estatal se presentaría una reforma al Código Penal, para garantizar el derecho de las mujeres a decidir, sobre sus derechos reproductivos-sexuales.