Elegantemente, para que no se ofenda, son fruslerías las ocurrencias o puntadas que el licenciado presidente usa como su peculiar y churrigueresco estilo personal de gobernar.
¿Qué tienen en común la jurista Celia Maya García, Marcelo Ebrard, la alcaldesa de Tepic, María Geraldine Ponce Méndez y el gobernador nayarita Miguel Ángel Navarro Quintero?
Desde el poder como dueño del poder máximo del país, desde el sábado 1 de diciembre de 2018 cuando juró defender a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ha hecho todo lo posible por dinamitarla.
“No escucho”, dijo Andrés Manuel López Obrador y en Lagos de Moreno se sintió el desprecio del licenciado presidente por el dolor de familias ofendidas y enlutadas. Nada nuevo.
¡Señor Andrés, señor Andrés!, uno de sus chamacos le dijo cosas feas y jaló la trenza a su princesita… --alertó un inquilino de la vecindad que regentea la conocida como Casa Guinda.