SemMéxico / Chilpancingo, Guerrero. 14 de junio del 2018.- Con el #NoEsElCosto, mujeres que integran la Red para el Avance Político de las Mujeres Guerrerenses, hicieron un llamado para frenar la violencia política por razones de género, en lo que va del proceso electoral, dos mujeres han sido asesinadas en el estado de Guerrero, en el país, un total de 305 personas entre hombres y mujeres han perdido la vida por una aspiración política.
Reyna Ramírez Santana integrante de la Red para el Avance Político de las Mujeres Guerrerenses, en un evento realizado en la tarde noche de este jueves, en la explanada de la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac, expuso que en el informe Destellen Consultora 2018, dio a conocer que en los 8 meses del proceso electoral, del 8 de septiembre de 2017 al 8 de mayo de 2018, se han contabilizado un total de 305 agresiones directas e indirectas en contra de actores políticos y familiares.
Agresiones que han dejado un saldo de al menos 93 políticos y políticas asesinados, 35 eran precandidato y candidato, incluyendo autoridades electas y dirigentes partidistas, principalmente del ámbito municipal, adicionalmente 44 familiares de actores políticos también perdieron la vida. Las 35 agresiones, indicó, se registraron en 30 entidades federativas, y 222 municipios del país. De los 93 políticos asesinados, 28 eran aspirantes a puestos de elección, 11 eran alcaldes, ex alcaldes, regidores, diputados y diputadas, y dirigentes partidistas; 7 eran candidatos con registro, 35 precandidatas, 2 alcaldes con licencia.
De las agresiones por entidades mencionó en primer lugar a Oaxaca con 14 asesinatos; Guerrero, 12; Puebla, 12; Ciudad de México 10; Tabasco, 8, Estado de México 7; Veracruz y Chihuahua, 6; San Luis Potosí 4. La activista mencionó a cada uno de los 12 actores políticos asesinados en Guerrero, entre los que destacan, Antonia Jaimes Moctezuma, y Dulce María Rebaja Pedro, ambas del municipio de Chilapa.
“Esto es sumamente reprobable” acusó Ramírez Santana, y es la peor de las agresiones y de la violencia política, señaló, aunque agregó que existe otra forma de violencia, que son las agresiones e intimidaciones, como ejemplo mencionó el caso de Nestora Salgado García, Azucena Salazar Pineda, Silvia Rivera Carbajal, Ana Laura Medina Bello y Sandra Velázquez Lara.
“por ello la red para el Avance Político de las Mujeres en Guerrero, dice, no es el costo dela vida por una candidatura, no debe ser el costo por una aspiración política, exigimos un alto a los asesinatos y expresiones de violencia política sobre todo contra las mujeres en el ejercicio peno de sus derechos, rechazamos de manera contundente y condenamos estos sucesos, exigimos al Estado Mexicano tome cartas en el asunto y medidas necesarias para que esto no siga ocurriendo”, expuso Ramírez Santana.
Subrayó la necesidad de formar y capacitar a los dirigentes de los partidos políticos y a quienes se encuentran en la toma de decisiones en los temas de violencia política, que las salas regionales impartidoras de justicia de los órganos electorales, cuenten con bases teóricas para observar con lentes de género, para que cada día más mujeres ejerzan su derecho de participar en las elecciones internas durante y después del ejercicio del poder libre de violencia. Destacó que es al interior de los partidos políticos, donde las mujeres sufren una gran violencia simbólica, institucional, por razón de género.
Zulma Carbajal, quien sostiene un juicio ciudadano, ante el Tribunal electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE), recalcó que la violencia política hacia las mujeres no es algo nuevo, se ha venido dando a través del tiempo por un sistema controlado por varones y contra el cual, mujeres feministas, han venido luchando de manera incansable para alcanzar un sistema en el que las mujeres, sean reconocidas como iguales, con los mismo derechos, obligaciones y oportunidades.
Consideró que “la corrupción y la sed de poder de unos cuantos, es el principal motivo de violencia política en razón de género, no solo en el Estado sino en todo el país”; indicó Zulma Carbajal, quien señaló como primera modalidad, el tráfico de influencias que los partidos políticos utilizan para designar candidatos y candidatas a modo, escudándose en acuerdos políticos, que son ilegales y violentan los derechos políticos electorales y humanos de sus militancia y que utilizan para relevar a las mujeres en candidaturas en municipios pequeños o donde ya se sabe van a perder.
