Después de muchos años escuché repetidamente las palabras “charrismo sindical”, “contratos de protección”, encubrimiento y complicidad de las autoridades laborales para cegar los derechos de las y los trabajadores, porque se vive una política laboral regresiva y nefasta.
Como si tuviéramos que recurrir al silabario, tras décadas, urge explicar al país entero que la violencia política contra las mujeres atenta contra sus derechos político-electorales las pone en riesgo y viola sus derechos humanos.
La polémica por el contenido de los libros de texto gratuitos, creados por el gobierno de la república en 1961, ha dado lugar a una reflexión trascendente, sobre el valor de los libros en la vida de cada ser humano.
Algo ha sucedido en las y los habitantes que poblamos este país del que Alejandro von Humboldt en 1803 dijo que era el “cuerno de la abundancia”, rico, próspero y pacífico. Algo ha sucedido que nuestra humanidad está paralizada y en silencio.
Lo cierto es que en la elección de la joven Amajac no existió una consulta ni la presentación de la propuesta con mujeres indígenas ni de pueblos originarios. Fue una acción, además de unilateral, insuficiente frente a los grandes pendientes del gobierno
En Mérida, mujeres que hace cuatro años impulsaron la Colectiva 50+1 se reunieron en un Segundo Congreso Internacional, y sin ambages plantearon que hay mujeres en todo el país que se preparan para los comicios de 2024.
En menos de una semana, el gobernador morenista ha multiplicado sus conductas. Se le atribuye influencia directa en la detención y las acusaciones contra la jueza Angélica Sánchez Hernández