* El Covid-19 ha empeorado muchísimo la situación, dice Sònia Bardají
* la Asociación de Familias Monoparentales de Barcelona apoya a 160 familias cada semana
Ana Martínez
SemMéxico, Barcelona, 14 de enero, 2021.- Sònia Bardají es la impulsora y presidenta de la Federación Catalana de Familias Monoparentales de Cataluña, y con ella hablamos hoy para conocer mejor el trabajo que hace esta entidad.
Cuando hablamos de familias monoparentales ¿de qué tipo de familia estamos hablando?
Estamos hablando del colectivo de familias monoparentales encabezadas por mujeres en un 90 por ciento, que tienen a su cargo uno o más menores. Hay que decir que el colectivo de familias monoparentales es muy diverso sin que tengan un mismo lugar de salida. Está el caso de la madre o el padre, sin otra persona, que opta por esta opción, pero son la minoría. Mayoritariamente acostumbran a ser mujeres vulnerables, que tienen muchas dificultades económicas para sacar adelante la familia. Y lo son por diferentes motivos: viudedad, encarcelamiento, pero sobre todo abandono. También nos encontramos con la estigmatización que se sufre por ser madre soltera (solo en el caso de las mujeres, claro) pero no es normal que a día de hoy esté todavía tan estigmatizada.
Si ya representaban un sector muy vulneralizado, ¿imaginamos que la pandemia habrá agravado mucho más esta situación, ¿no?
Con el tema del Covid-19 ha empeorado muchísimo la situación porque normalmente tienen un trabajo precario, pero actualmente ha aumentado muchísimo la pobreza y muchas de ellas no cobran el ERTE y están sufriendo muchísimo. Nosotras, desde la asociación, cada semana repartimos a más de 160 familias.
Ahora, muchas personas pueden teletrabajar, pero nuestras familias normalmente tienen trabajos precarios y su trabajo es más físico. Y las que pueden teletrabajar viven situaciones muy estresantes, pues, no pueden tener cuidado de los menores y teletrabajar a la vez.
El Covid-19 ha hecho estragos, no han podido salir de casa durante muchas semanas y cuando tienes criaturas pequeñas tampoco las puedes dejar solas en casa para ir a comprar, por eso tenían que salir con ellas y muchas familias han sido agredidas verbalmente por llevárselas a comprar. Y no hablemos de cuando la madre se ha puesto enferma. Conocemos algunos casos que han pasado el Covid solas en casa encontrándose mal, y no han podido ir al hospital ya que no tenían donde dejar a sus hijos e hijas.
¿La Federación de Familias Monoparentales de Cataluña a cuántas entidades representa y cuántas familias están atendiendo?
Cuando ya llevábamos unos años de existencia de la Asociación de Familias Monoparentales de Barcelona, vimos que cada vez había más necesidad de organizar asociaciones similares en toda Cataluña. Inicialmente apoyamos a las personas promotoras de Manresa, Sabadell, Vilanova i la Geltrú, la Seu d’Urgell… y cuando ya había unas cuántas creamos la Federación, que está formada por 8 entidades. Y casi de manera simultánea en Europa surgió un movimiento parecido que culminó con la creación de la European Network of Single-Parent Families, de la cual nuestra Federación ha sido presidenta. Fue socia fundadora y hemos estado al frente, pero este año, con el Covid-19 no hemos podido realizar ningún tipo de acción.
Volviendo a Cataluña, la asociación con más presencia es la de Barcelona, que apoya a 160 familias cada semana. También apoyamos puntualmente con ropa, pero ahora mismo nuestras fuerzas están dirigidas a que todas las familias puedan comer. Desde la Federación también damos información y las derivamos a bancos de alimentos o a inserción laboral. Hacemos orientación y formación para encontrar trabajo, asesoramiento legal, damos material infantil, entre otros.
¿Cuál es la situación en Cataluña?
En Cataluña tenemos un carné que nos sirve de muy poco, porque solo tenemos descuentos a nivel de transporte, en centros de enseñanza y poca cosa más.
Las familias monoparentales somos un colectivo no invisibilizado sino claramente ignorado. Y los políticos siguen sin hacernos caso. Como dice el último informe de Unicef, las familias monoparentales somos las personas que sufrimos más pobreza, especialmente las encabezadas por mujeres.
Fíjate que el 11 por ciento de los hogares catalanes son monoparentales, según las cifras de IDESCAT 2018, y de éstas, el 88 por ciento están a cargo de una mujer. La renta anual media por unidad de consumo es la más baja y tenemos la tercera tasa de riesgo de pobreza. Esta es la situación tan precaria de las familias monoparentales encabezadas por mujeres.
¿Qué acciones y propuestas hacen desde la Federación?
Luchamos por visibilizar las dificultades de las familias monoparentales, trabajando para mejorar su calidad de vida y dar herramientas que faciliten la vida a sus hijos e hijas. Reivindicamos también la igualdad de derechos y oportunidades para las familias monoparentales y por la libertad de ser madre o padre no desde el concepto de familia tradicional, sino desde una perspectiva de familia plural.
Queremos el bienestar de las familias monoparentales. Que la ley las incluya con una serie de ventajas por la vulnerabilidad social que están sufriendo estas familias. Tanto a nivel estatal como autonómico pedimos el mismo, unos derechos y que estas familias no caigan en la pobreza, puesto que todos los informes dicen que somos el colectivo con más pobreza que hay.
Varias entidades reclaman una Ley de Familias Monoparentales, ¿cómo está el tema?
Con la actual legislación que tenemos es muy difícil encontrar una familia monoparental que no tenga problemas económicos.
Seguimos trabajando a nivel estatal para que se cree esta ley. Y a nivel autonómico, la Generalitat se comprometió a hacer una ley de familias monoparentales, pero ahora ha quedado todo parado por el Covid-19 y no hemos tenido más información a pesar de que estamos presionando para que continúen ayudando a las familias.
Una curiosidad, si mayoritariamente este tipo de familias están formadas por mujeres, ¿por qué no cambian el nombre a familias monomarentales?
A nivel estatal estamos intentando que el concepto cambie y que se diga monomarental, pero a nivel lingüístico se considera monoparental, que viene de la palabra «pariente» y no de «padre». Y según nos dicen sería una incorrección lingüística, aunque entre nosotras siempre nos denominamos como monomarentales.
SEM-LaIndependent/am
