«Yucatán cada vez más cerca del matrimonio igualitario»
SemMéxico. Mérida, Yucatán; 9 de abril de 2019.- Luego de años de espera, este martes en punto de las 13:30 horas, las diputadas y diputados del Congreso del Estado discutirán la iniciativa del matrimonio igualitario en sesión de la Comisión de Puntos Constitucionales y Gobernación, para determinar si se discute próximamente en el Pleno.
Durante los últimos meses, el debate en torno al tema ha polarizado las postrras de los legisladores, pues mientras algunos como Milagros Romero, de Movimiento Ciudadano expresan estar a favor de la aprobación de la iniciativa, otros como Rosa Adriana Díaz Lizama, de la bancada panista han hecho polémicas declaraciones en contra.
Fue la misma Rosa Adriana quien, luego de decir que el 99 por ciento de las personas que conoce están en contra del matrimonio igualitario, propuso someter a consulta el tema, por lo que el pasado miércoles el Congreso abrió un micrositio en su página web para que la ciudadanía pudiera emitir opiniones al respecto, mismo que cerró el viernes 5 de este mes con un total de 14 mil 116 registros.
Con la finalidad de contribuir al análisis que hacen en este momento los diputados, este lunes dos de las solicitantes de la Alerta de Violencia de Género (AVGM), Ligia Vera Gamboa y Nancy Walker, en conjunto con Felipe Herve España Aguilar, miembro del Colectivo por el Matrimonio Igualitario en Yucatán, entregaron a tres de las comisiones del Congreso un total de 22 mil 825 firmas a favor de la iniciativa.
En entrevista, Vera Gambia detalló que dichas firmas fueron recabadas a través de la plataforma Change.org, cuya petición fue realizada por los miembros del mencionado colectivo, y que hasta la fecha continúa incrementando sus números.
«Y si bien, estamos ciertas de que los derechos humanos no se pueden someter a consulta, sí también es una forma de decirles a los y las diputadas de esta Legislatura que hay mucha gente en esta sociedad a favor del matrimonio igualitario y del respeto a los derechos humanos «, declaró.
Además de la Comisión de Puntos Constitucionales, donde se someterá a análisis la iniciativa, las activistas hicieron entrega de los registros a la Comisión de Igualdad de Género, con la finalidad que se reconozca el matrimonio igualitario, tal como establece la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim) en las recomendaciones que entregó al Gobierno del Estado como respuesta a la solicitud de la AVGM.
Asimismo, la investigadora del Centro de Investigaciones Regionales «Dr. Hideyo Noguchi» de la UADY, indicó que las firmas se entregaron a la Comisión de Derechos Humanos, para recordarle a los diputados que la conforman que «los derechos humanos no se pueden someter a consulta ni a derechos de opinión», por lo que «tienen que seguir» la noematividad legal y jurídica establecida por organismos como la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la CNDH y la SCJN.
«Es la misma Suprema Corte de Justicia la que ha dicho que cualquier código estatal que no apruebe o reconozca el matrimonio entre personas del mismo sexo es inconstitucional».
La polémica y la deuda histórica
Fue el 15 de julio de 2009 que Congreso de Yucatán aprobó por mayoría de votos diversas reformas al Código Civil y al Código de la Familia del estado, en los cuales se estableció que el matrimonio civil y el concubinato son «una institución por medio de la cual se establece la unión voluntaria y jurídica de un hombre y una mujer».
Desde entonces, las legislaturas subsecuentes han hecho caso omiso a las peticiones que los miembros de la sociedad civil y las bancadas de oposición han hecho para que se modifiquen los artículos donde es establece dicha definición del matrimonio.
Tuvieron que pasar casi 10 años para que el tema fuese puesto sobre la mesa, luego que el exgobernador Rolando Zapata Bello presentara la iniciativa justo antes de culminar su mandato en 2018. No obstante, la Legislatura anterior heredó la discusión a sus sucesores.
En este sentido, Vera Gamboa reconoce que «el tema es polémico» y que «divide» no sólo a las y los legisladores, sino también a la sociedad civil básicamente en dos grupos como ella dice: los que están a favor de los derechos humanos y los grupos «anti derechos» que luchan por que la iniciativa ni siquiera sea considerada para votación.
Asimismo, la activista recalcó que estos últimos grupos, confirmados principalmente por la comunidad religiosa en Yucatán, se organizaron para emitir su voto en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo, circulando instrucciones precisas de cómo acceder a él y qué comentarios poner para boicotear el debate del tema.
Por otra parte, en la entidad han corrido los rumores de que el Congreso cerrará sus puertas a la ciudadanía al momento de discutir la aprobación de la iniciativa.
Al respecto, la académica señaló que, de ser ciertos los rumores esto «se vería muy mal», pues la actual legislatura «tiene una deuda con la historia», además que no estarían actuando en la modalidad del parlamento abierto ni en favor de la gobernanza.
«Cuando hablamos de gobernanta estamos hablando de que todos los actores nos podamos sentar a la mesa a dialogar en busca de un objetivo, que en este caso es el respeto a los derechos humanos de un grupo que históricamente ha sido vulnerado en sus derechos como es la comunidad LGBTTTI+».
Finalmente, aseguró que tanto ellas como en resto de la sociedad civil estarán al pendiente de las decisiones que tomen las y los diputados, a la espera de que se apruebe la iniciativa, pues México es uno de los países que ha firmado» innumerables» tratados internacionales e el marco del respeto a los derechos humanos.
«Lo único que le medimos a los diputados y diputadas es que permitan que en voto sea libre, no sea por un bancada, porque sería una forma tendenciosa de manejar votaciones. Estaremos super oendiebrws de los resultados en estos días», culminó.
