- No se aceptará ningún retroceso en la legislatura que está por comenzar: Dulce Ma. Sauri
- La maestra norteña, querida, homenajeada en la Cámara de la Paridad por ser su impulsora
Elda Montiel
SemMéxico, Cd. de México, 14 de agosto, 2021.- La progresividad del derecho de las mujeres a la participación política de las mujeres no se negocia, no se transige fue la principal enseñanza de María Elena Chapa Hernández afirmó la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de la Paridad, Dulce María Sauri Riancho.
Luego expresó que a la segunda legislatura de la paridad, que habrá de integrarse el próximo primero de septiembre, “no retroceder sino avanzar más lejos en ocupar más espacios de poder para las mujeres, ejercer más poder que las mujeres que formamos parte de la LXIV Legislatura”.
En el marco de la sesión semipresencial del Segundo Periodo Extraordinario de la Cámara de Diputados en que se realizó un homenaje luctuoso a la política feminista y ex legisladora María Elena Chapa fallecida el pasado 9 de agosto.
Las legisladoras Martha Tagle Martínez y Wendy Briseño Zuloaga coincidieron que la mejor manera de rendir homenaje a la ex legisladora María Elena Chapa era exigir a la LXV Legislatura que las mujeres estén en los órganos de gobierno, en la Junta de Coordinación Política, en la Coordinación de las Mesa Directiva, en los espacios de decisión política.
María Elena Chapa fue una mexicana excepcional, comprometida con su género y la democracia, de voz firme e ideas claras, congruente en su actuar y luchadora incansable hasta el último día de su vida, aseguro Tagle Martínez.
Wendy Briseño Zuloaga tras señalar que en la LXV Legislatura exigirán estar en los espacios que les corresponden “la mitad ni más ni menos” ya que la paridad es un principio constitucional.
Haciendo referencia a la ex legisladora Chapa dijo que las voces de las mujeres cuentan más desde la casa del pueblo y abrazando los principios de democracia y justicia, por lo que lo personal es político.
También se refirió a la protesta de las mujeres mexiquenses en demanda de la interrupción legal del embarazo y pidió a los legisladores del Estado de México no reprimir las protestas y atender la demanda de las mujeres y actuar en consecuencia para dar la discusión del dictamen conforme a la ley.
Por la fracción parlamentaria del PRD la petición de la diputada del PRD Mónica Bautista Rodríguez fue abrir paso a las mujeres y exigir a la LXV Legislatura cumpla con la paridad incluida la Junta de Coordinación Política que ha sido presidida solo por hombres.
Al merecido homenaje se sumó la diputada Guadalupe Almaguer Pardo por lo que expreso que rendir homenaje a María Elena Chapa es hacerlo con el ejemplo por lo que pidió fortalecer las instituciones con el presupuesto y no desmantelarlas.
La diputada Dulce María Sauri Riancho recordó que María Elena Chapa tomo la bandera de establecer cuotas obligatorias para los partidos políticos en la postulación de las candidaturas e impulso muchos otros temas.
Recordó que fue una priista progresista cuya historia política compartieron desde 1988 tras una larga Permanente en la que por primera vez el PRI tuvo un reto en las sesiones por la presencia de las oposiciones tanto en las Cámara de Diputados como en la de Senadores.
Fue presidenta del Consejo Consultivo de un organismo que iba naciendo para lograr la aplicación de los compromisos contraídos en Beijing 95 para avanzar hacia la igualdad sustantiva e instalar la perspectiva de género en las políticas públicas con énfasis en los presupuestos etiquetados para las mujeres.
En el año 2000 continuo para conseguir la cuota de género obligatoria y junto con otras diputadas de la LVIII Legislatura fueron las parteras de la Ley de Inmujeres.
Se unió a la denuncia del fraude a la Ley cuando las mujeres propietarias de la LXI Legislatura fueron obligadas a hacerse a un lado para ser sustituidas por hombres, “los juanitos” que se apropiaron de sus espacios mediante violencia política en razón de género.
También recordó la indignación cuando se intentó evadir la cuota 60- 40 y se unieron diez valientes mujeres de distintos partidos políticos e interpusieron un juicio de protección de derechos políticos, a la cabeza María Elena Chapa por eso la sentencia 12624 de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación lleva su nombre.
Al respecto la diputada Martha Tagle Martínez recordó que gracias a ella en 2012 los partidos políticos sin excepción, mayoría o representación proporcional tuvieron que cumplir la cuota, postular formulas del mismo género y registrar el mayor número de mujeres hasta ese momento. Así se ganó el debido respeto a sus iguales.
En su natal Nuevo León, tuvo a su cargo la creación del Instituto Estatal de las Mujeres en 2009 junto con la doctora María del Refugio Ávila “Cuquita”, secretaria ejecutiva de la institución, que lo hicieron destacar durante dos sexenios como un referente nacional. Dulce María Sauri también menciono el fallecimiento de Cuquita este 9 de agosto.
Legisladoras y legisladores recordaron como María Elena Chapa les dio voz a millones de mujeres fue diputada local, federal, senadora, servidora pública, y merecedora de múltiples reconocimientos entre ellos el de 2018 otorgado por el Senado, la presea Elvia Carrillo Puerto.
Como inspiraba a las mujeres sin importar colores partidistas, lograr la paridad y enseño a las mujeres que tuvieron oportunidad de trabajar con ella a trabajar en la pluralidad en la diversidad, multiplicando, y principalmente les enseño que los temas de las mujeres están por encima de los partidos políticos, y que los derechos de las mujeres se ejercen
María Elena Chapa, que tomó a partir de esa experiencia, la bandera de establecer las cuotas obligatorias para los partidos políticos en la postulación de las candidaturas.
Su inmenso legado
María Elena, que acompañó la preparación de la agenda que llevó México a la IV Conferencia Internacional de la Mujer en 1995 en Beijing. En esos inolvidables 15 días, participantes de distintas ideologías y corrientes políticas que integraron la delegación oficial, compartieron logros y avances con las mujeres de organizaciones no gubernamentales, siendo siempre Ma. Elena la incansable interlocutora.
María Elena Chapa, fue presidenta del Consejo Consultivo de un organismo que iba naciendo para lograr la aplicación real, plena, de los compromisos contraídos en Beijing 95 para avanzar hacia la igualdad sustantiva e instalar la perspectiva de género en las políticas públicas, con énfasis en los presupuestos etiquetados para las mujeres.
Ella, María Elena, supo apoyar firmemente a la Comisión Nacional de la Mujer que, a partir de cero, empezó a desarrollar el entramado institucional para procurar el ejercicio pleno de los derechos de las mujeres y las niñas, ella que apoyó decididamente la Ley de Asistencia y Prevención de la Violencia Intrafamiliar. (Antecedente de la Ley de Acceso de las Mujeres a una vida Libre de Violencia) basándose en los fundamentos de la CEDAW
María Elena Chapa, que llegó a esta Cámara de Diputados después de su participación en el Congreso de Nuevo León, y en el año 2000 continuó con la brega para conseguir la cuota de género obligatoria. Fue forjadora del avance que significó la reforma a la Ley Electoral por la que se estableció la obligación a los partidos políticos de no rebasar el 70% de las candidaturas de un mismo género. Ella, junto con otras diputadas de la LVIII Legislatura, fueron las parteras de la Ley de Instituto Nacional de las Mujeres, culminando un largo camino hacia la creación de la estructura institucional iniciado desde Beijing 95.
Años después, su voz se unió a la denuncia del fraude a la ley cuando las mujeres propietarias de la LXI Legislatura fueron obligadas a hacerse a un lado para ser sustituidas por hombres, esos “Juanitas” que se apropiaron de sus espacios mediante violencia política en razón de género.
Ella, María Elena, que supo traducir la indignación en acción cuando de nuevo, se intentó evadir la cuota 60-40 bajo pretextos que, curiosamente, unieron a partidos acérrimos opositores en ese intento. Fue entonces cuando 10 valientes mujeres de distintos partidos políticos, los rebasaron e interpusieron un juicio de protección de derechos políticos. A la cabeza fue María Elena Chapa. Por eso la sentencia 12624 de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación recibe su nombre. Gracias a ellas y a su decidido empeño, en 2012 todos los partidos, sin excepción de la vía de mayoría o la representación proporcional, tuvieron que cumplir la cuota, postular fórmulas del mismo género y registrar el mayor triunfo de mujeres hasta ese momento. Así, ganamos el debido respeto a las iguales.
María Elena Chapa, que estuvo una y otra vez a la vanguardia de la demanda de la paridad como principio consagrado en la Constitución, hasta que se alcanzó en 2014.
María Elena, en su natal Nuevo León, tuvo a su cargo la creación del Instituto Estatal de las Mujeres en 2009. Junto con la doctora María del Refugio Ávila, Cuquita, secretaria ejecutiva de la institución, la hicieron destacar durante dos sexenios como un referente nacional.
Unidas en este proyecto de vida, ambas cruzaron el mismo día hacia la eternidad de la muerte.
Vendaval feminista, a la que nada ni nadie arredraba cuando se trataba de luchar por los derechos de las mujeres y las niñas; fuego de libertades, que ardía frente a la injusticia y la discriminación. Alegre, decidida, lectora incansable, amiga siempre presente. En tiempos de modernidad y amores líquidos, la solidez de sus principios aparece como guía para las nuevas generaciones de mujeres.
María Elena Chapa, la que nos enseñó que la progresividad del derecho de las mujeres a la participación política no se negocia, no se transige. Por eso, la segunda Legislatura de la Paridad, la que habrá de integrarse el primero de septiembre próximo, no puede, no debe retroceder, sino avanzar más lejos, ocupar más espacios, ejercer más poder que las mujeres que formamos parte de la LXIV Legislatura.
María Elena Chapa, la incansable. Toma el respiro de la eternidad porque otras inspiradas en ti, continuarán en la lucha.
