- Existen tres cosas que confluyen para el incremento de la violencia contra las mujeres: la desigualdad, la recompensa y que la mujer es utilizada como un arma de guerra, afirma Salguero
Itzel Nicté UC Domínguez
SemMéxico/La Cadera de Eva. Cd. de México. 22 de septiembre 2020.- Ya van 2,242 mujeres víctimas de feminicidio en los primeros 7 meses del año, afirmó María Salguero, feminista, investigadora y creadora del mapa de feminicidios en México, durante la conferencia semanal de Nosotras Tenemos Otros Datos.
La científica de datos afirmó que Guanajuato tiene más feminicidios que el Estado de México. También, aclaró que para la realización del mapa no utiliza los números del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), ya que hay un subregistro; este existe debido a que muchos casos son registrados como homicidios, aun teniendo las características de un feminicidio, así lo informa La Cadera de Eva.
«En México se está dando un nuevo patrón en estos contextos de violencia armada por el crimen organizado»
La investigadora afirmó que en el país se está dando un nuevo patrón de asesinato de mujeres en contextos de violencia armada y crimen organizado, que se relaciona con las pugnas por el territorio entre grupos de la delincuencia organizada.
«La pugna por el control de los territorios también se está escribiendo en los cuerpos de las mujeres»
María Salguero
De acuerdo con la investigadora, el patrón de los asesinatos de mujeres en contextos de violencia armada es la motivación al asesinato como una venganza. «Son venganzas ejercidas por hombres contra terceras personas que son mujeres«. También comentó que recientemente se ha atentado contra los hijos de estas mujeres.
La investigadora afirmó que los contextos de violencia inciden en la forma en que son asesinadas las mujeres. Aseguró que después del plan anti-huachicol se empezó a afectar a la población civil en términos de cobro de piso, extorsión y trata de personas.
La mujer es utilizada como arma de guerra
María Salguero dijo que existen tres cosas que confluyen para el incremento de la violencia contra las mujeres: la desigualdad, la recompensa y que la mujer es utilizada como un arma de guerra.
La cosificación de la mujer pone en una situación aún más grave a mujeres y niñas en contextos de violencia armada, puesto que, tal como lo indica María Salguero, «la mujer es vista como un objeto sexual, pero también cómo un objeto de posesión del rival«.
Los grupos armados llegan a asesinar a las mujeres que son familiares o parejas sentimentales de los miembros de grupos armados rivales. De tal forma, las mujeres son vistas como la pertenencia del rival, a través de la cual pueden provocarle daño y enviarle un mensaje.
La investigadora afirmó que en los casos de feminicidio en contextos de violencia armada, se presenta una gran violencia para causar la muerte, la exposición del cuerpo en lugares públicos con mensajes o manipulaciones y, en ocasiones, violencia sexual.
La coordinadora del mapa de feminicidios en México afirmó que para los primeros seis meses del año, Guanajuato se mantuvo en primer lugar. Así, desplazó al Estado de México, que históricamente se había mantenido como uno de los estados con mayor número de feminicidios.
Sin embargo, aclaró que la situación en Guanajuato es diferente, debido a que las pugnas entre cárteles por el territorio han aumentado la violencia que sufren las mujeres. «Es una guerra de exterminio, y en esas guerras de exterminio terminan asesinando a las mujeres«.
Colima tiene un alza en el asesinato de mujeres por el sentido de pertenencia
De mujeres asesinadas por cada 100 mil habitantes, los estados con más mujeres asesinadas son Colima, Guanajuato, Chihuahua y Zacatecas. Resaltó que Colima tiene un alza en el asesinato de mujeres por el sentido de pertenencia, relacionado con la pelea por el control del puerto.
Por otra parte, María Salguero comentó que los contextos de violencia organizada también aumentan el consumo de droga en las zonas, con lo que aumenta la violencia comunitaria contra las mujeres.
Las violaciones no son denunciadas por las mujeres, puesto que el poder que ha adquirido el crimen organizado provoca que las víctimas no quieran denunciar.
(Información publicada en La Cadera de Eva)
