En la plaza central, desplegaron las fotos de los familiares desparecidos y también las fotos que les encargaron las familias en sus países que no pudieron integrarse a la caravana.
Escucharlas es atreverse a mirar el inmenso drama humano que se está viviendo en la frontera sur estadounidense y reconocer cómo las migraciones nos ponen por delante el reto de transformar el sistema.
Honduras ha vivido desde mayo de 2019 inmerso en una nueva crisis después de que el Parlamento aprobase medidas que pretendían privatizar servicios de educación y salud pública.