- “Estamos peor, comparados con otros años”
Josefina Aguilar Pastor
SemMéxico, Chilpancingo, Gro, 14 de junio de 2022. – Enfermedades físicas y emocionales derivados de la incertidumbre laboral y salarial que enfrentan, han comenzado a manifestarse en trabajadores de la Secretaría de Salud, pertenecientes al llamado Ramo 12, conformado en su mayoría por mujeres, que atienden programas como salud materna, perinatal, aborto seguro, violencia de género e igualdad de género, entre otros.
Dada esta situación empezaron aparecer en redes sociales los hastag: #Justicia LaboralRamo12, #SinBasificaciónNoHayransformación y #Ramo12TambienVale, que hacen referencia a la situación por la que actualmente atraviesan los trabajadores.
El Ramo 12, de naturaleza federal, alberga diferentes programas a lo largo y ancho del país, entre ellos, políticas de salud pública, salud mental, emergencias, SSR para adolescentes, planificación familiar y anticoncepción. Salud materna y perinatal, Aborto seguro, violencia de género, Igualdad de Género, Salud de la Adolescencia, Salud de la infancia, entre otras.
El personal de este ramo es contratado cada tres meses con el fin de no generar antigüedad y en consecuencia, derechos laborales, en todos los estados; la mayoría carece hasta de las condiciones mínimas para realizar su trabajo, como espacios físicos, papelería, mobiliario.
Incluso les han llegado a decir que lo pongan de su salario, al fin y al cabo ganan “bien”, aunque el salario es inestable, no cuentan con derecho a aguinaldo, a los días de descanso establecidos en la ley, los festivos, a ninguna prestación “ni siquiera del derecho a preguntar”.
En el caso de Guerrero, el contrato concluyó el 30 de mayo pasado, y hasta el momento, se mantienen en la incertidumbre de una nueva recontratación, luego de que el presidente de la república, ha venido manejando en su discurso y ofrecimiento que serían basificados, lo cual no ha ocurrido.
Además de que prácticamente todo el personal es constantemente violentado en todos sus derechos, incluso en del acceso a la información, si preguntan sobre su situación laboral y salarial, se las niegan o incluso son ignorados “si llegas a preguntar, hay molestia, no directamente pro si hay cierta intimidación, observan quienes son los que según ellos, están alborotando”, comenta un trabajador.
Cuando el contrato termina, la Secretaría de Salud designa a personal de base a atender los diferentes programas, aunque no cuente con el perfil profesional, por ejemplo en el de violencia de género, igualdad de género, que requiere personal con determinado perfil, como psicólogas, con ello argumenta que el servicio no se interrumpe, aunque la mayoría de las veces las mismas usuarias y usuarios, prefieren dejar de atenderse por la falta de personal calificado.
A pesar de tratarse de personal que atiende la salud de otras personas, lo hacen completamente desgastados, física y emocionalmente pro la falta de certidumbre laboral y salarial, durante la pandemia, recibían llamadas de atención no solo fuera de horario, sino incluso sábados y domingo “no hemos parado, no podemos porque la gente nos busca y ella no sabe de mi situación laboral”, menciona la fuente que por obvias razones pidió anonimato.
Debido a esta situación que impacta directamente en la estabilidad emocional, salud mental y obviamente en a economía de las y los trabajadores de este Ramo 12, “el que no te digan nada, no saber si vas a regresar o no, que nos digan que las puertas están abiertas si están inconformes, impacta en la salud emocional, porque vivimos del trabajo”.
A nivel nacional son alrededor de 200 trabajadores albergados en el Ramo 12, y en Guerrero, 60, en ambos casos, estiman que el 60 por ciento son mujeres.
Señalaron que este año ha sido el peor en comparación con otros, es que a nivel nacional, han comenzado a organizarse para tomar medidas, de ahí, que durante la mañanera de este lunes, comenzaron a manejar hastag con mensajes como #Justicia LaboralRamo12, #SinBasificaciónNoHayransformación, #Ramos12TambienVale, entre otros.
En el caso Guerrero, piden la intervención de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, así como de la Secretaría de Salud, Aidé Ibarez Castro, para atender esta situación.
