Roberto Vizcaíno
SemMéxico, Ciudad de México, 19 de septiembre del 2022.- Dice el refrán popular, que “no hay plazo que no se cumpla… ni deuda que no se pague” y esta semana quizá le toque ya a Ricardo Monreal definir su situación dentro de la 4T, y al lado de Andrés Manuel López Obrador.
Y es que todas y todos sabemos que la iniciativa de la diputada Yolanda de la Torre que fue avalada por 60 de sus compañeras y compañeros en San Lázaro y que ha provocado la debacle final de Alejandro Moreno dentro de la Alianza Va por México, no va a ser aprobada en el Senado.
El propio Monreal, un poco como premonición del desastre que va a significar esa derrota legislativa y política, mediática, para el presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo a fines de la semana anterior que faltarían 11 votos de la oposición para llegar a los 86 votos que se requiere para alcanzar la mayoría constitucional calificada.
Y que en sus negociaciones para sacar adelante este dictamen –en el que no cree ni está de acuerdo-, sabe que la oposición “se ha estado cerrando”, es decir, no va a dar su aprobación a esta iniciativa.
La oposición integrada por 13 senadores/as del PRI, 21 del PAN, 5 del Grupo Plural, 11 de Movimiento Ciudadano y 3 del PRD –en total 53-, ya dejó en claro que no apoyará eso de extender el mandato del Ejército en las calles de México.
Se cierra el espacio para Monreal
Atrapado por la circunstancia, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado y único aspirante presidencial de Morena por la libre, vive en estos momentos un hecho que o lo elevará a los cielos del presidente Andrés Manuel López Obrador o lo hundirá en alguno de los últimos círculos de la Divina Comedia de Dante Alighieri.
Hoy todos/as dentro y fuera del primer círculo del mandatario, especialmente entre las llamadas corcholatas electoreras de AMLO –a saber Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard-, y de Monreal, está atenta y atentos a lo que logrará o decidirá el zacatecano.
Reconocido como el mayor negociador de acuerdos de los últimos años en el Congreso Mexicano, Ricardo Monreal, dicen algunos/as, bien podría dar la sorpresa con los 11 votos que faltan dentro de la oposición para sacar adelante la iniciativa de extender el mandato del Ejército en las calles de México hasta 2028.
Otros/as advierten que en esta ocasión Monreal simplemente no podrá conseguir esos votos y entonces se enfrentará de nuevo a la ira y la descalificación del presidente Andrés Manuel López Obrador lo que podría obligarlo a abandonar Morena y sus cargos en la Cámara Alta.
Como sea que se defina su circunstancia, Monreal no ha engañado a nadie. A dicho que considera que la iniciativa anterior, en la que se abstuvo, es inconstitucional y que él no iba a avalarla de ninguna forma.
Esta otra iniciativa en curso, ha explicado el zacatecano, es más o menos lo mismo, ya que modifica la Reforma Constitucional de creación de la Guardia Nacional, para la cual las diputadas y los diputados y senadores/as consideraron un plazo de 5 años, es decir hasta 2024, de asistencia del Ejercito para que este nuevo cuerpo policíaco quedará debidamente instalado en el combate al crimen organizado y carteles.
Como se considera que las circunstancias han cambiado, y que la Guardia Nacional no podrá ser el único frente de batalla contra la delincuencia en el país, es entonces que el PRI -con Alejandro “Alito” Moreno a la cabeza- promovió esta iniciativa en la que no están de acuerdo sus 13 senadoras y senadores.
En este contexto se ve muy complicado que Monreal vaya a poder negociar los 11 votos que faltan.
De acuerdo a su propia ruta, hoy lunes las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos II – las 2 bajo el dominio absoluto de los senadores/as de Morena- debatirán el dictamen aprobado en Diputados/as a fin de que mañana martes o a más tardar el miércoles se lleve al Pleno.
O sea…
El PRI de Alito dice que quiere la Alianza
Desconocido, repudiado por Marko Cortés y Jesús Zambrano… y varios miles de otros/as dirigentes de la oposición y de la sociedad civil, incluidos muchos de su propio partido, Alejandro “Alito” Moreno salió con el cuento a fines de la semana pasada con que él buscaría restituir la Alianza Va por México.
Y envió a su encargada de Comunicación Social, la sinaloense y diputada pluri Paloma Sánchez a declarar que el PRI de Moreno está a favor de la Alianza «Va por México»,
Sin el menor rubor agregó:
«El PRI tiene la mano extendida… Ojalá que los sentimientos de la ultra derecha no terminen imponiéndose», y destruyan la coalición del tricolor con el PAN y el PRD.
«Que NO sea su odio anti-priista el que orille a que termine ganando Palacio Nacional».
Aquí concluyó Paloma, «o gana la alianza, o gana AMLO».
¡What!, exclamaron no pocas, no pocos…
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