* Maribel Velasco García acusa al Frente Indígena de Resistencia Juxtlahuaca de amenazas de muerte
* Munícipe Rogelio Bautista asegura que Irma Galindo defensora del bosque no está desaparecida
Soledad Jarquín Edgar
SemMéxico, Oaxaca, 9 de diciembre, 2021.- Maribel Velasco García, síndica municipal de San Esteban Atlatlahuca, denunció diversas amenazas de muerte por su labor en el acompañamiento a familias por el asesinato de una mujer y un hombre, desplazamiento de personas y lesiones a pobladores de su municipio por parte de elementos del Frente Indígena de Resistencia Juxtlahuaca, además del incumplimiento de medidas de protección por parte de la Secretaría de Seguridad Pública “por falta de recursos”.
En conferencia de prensa, en la que estuvo junto con el presidente municipal de San Esteban Atlatlahuca, Rogelio Bautista Barrios y el regidor de Hacienda, Carlos Riaño Sandoval, también amenazados, se explicó que todo inició como consecuencia de un problema comunitario y el engaño a las autoridades y poblaciones de Mier y Terán, Guerrero Grande y Ndoyonoyuji de que deberían ser municipios independientes.
Explicó que los problemas iniciaron en noviembre de 2019 cuando fue asesinado Francisco Rivera y en agosto pasado fue asesinada Serapia García, una mujer de la tercera edad y quien participaba en una asamblea comunitaria, lo que derivó en la detención de José Fabián Bautista y recientemente de Gabriel Hernández, un tercer implicado, el ex agente municipal de Mier y Terán, Genaro Sandoval, quien falleció.
Las acciones desarrolladas por la Fiscalía General de Justicia del Estado han dado pie para que se incrementaran las amenazas en contra de la síndica San Esteban Atlatlahuca, municipalidad asentada en la región de la mixteca oaxaqueña.
Las tres personas señaladas, dijo, habían cometido diversos delitos en contra de la población, “al menos una vez por mes”, entre ellas retención ilegal de personas, lesiones y hasta el secuestro por 10 días de un hombre y una mujer, por quienes pidieron rescate. En suma se trata del seguimiento de al menos 25 carpetas ante la Fiscalía.
Mi labor es acompañar a las víctimas de estas agresiones y en consecuencia he sido responsabilizada de las detenciones y de provocar el conflicto, por lo que durante estos dos años he recibido diversas amenazas de muerte y el Frente de Resistencia Juxtlahuaca es quien me señala de ser yo quien hace las denuncias, expuso Maribel Velasco García.
Dijo que entre las víctimas se encuentran un número importante de mujeres, algunas viudas, huérfanas y huérfanos, mujeres desplazadas de su comunidad y que viven en un albergue ubicado en San Esteban Atlatlahuca.
Dijo que a pesar de las condiciones de inseguridad y de que desde septiembre de 2020 la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca y más tarde el Tribunal Electoral del Estado de Oaxaca emitieron medidas cautelares hasta ahora no se han cumplimentado en su totalidad por parte de la Secretaría de Seguridad Pública “por falta de recursos”.
Dijo que en Oaxaca entre el 35 y 40 por ciento de los 570 municipios de la entidad viven conflictos comunitarios similares y, sin embargo, no existen protocolos ni acciones afirmativas para que las mujeres en general y en particular las indígenas puedan desempeñar su cargo.
Por eso cuando pasan estas cosas, las mujeres decimos que mejor no le entramos y dejamos que los hombres sigan “llevando las riendas”.
En ese sentido, la presidenta del Grupo de estudios sobre la mujer Rosario Castellanos, Angélica Ayala Ortiz lamentó que las instancias responsables no puedan garantizar la integridad de la síndica de San Esteban Atlatlahuca.
Reveló que su organización, que ha dado acompañamiento a diversos casos de violencia política en razón de género, solicitó la intervención de la Secretaría de las Mujeres de Oaxaca (SMO) “y lo que responden es un correo electrónico diciendo aquí está un número telefónico por si quieren comunicarse con nosotras”.
¿De qué estamos hablando? De una falta de política pública que atienda las necesidades de las mujeres. Se respondió la defensora de derechos humanos de las mujeres.
Tanto el presidente municipal como el regidor de Hacienda condenaron la violencia y exigieron que se atienda a la brevedad el conflicto comunitario y se den medidas de protección tanto a ellos como a la síndica.
Irma Galindo no está desaparecida
En su momento el presidente municipal, Rogelio Bautista Barrios, dijo que Irma Galindo Barrios, defensora de los bosques, no está desaparecida, “es la tercera vez que desaparece”, la primera vez en 2019 y otra en 2020.
“Hay personas de mi municipio que sí saben dónde anda, que conocen dónde está”, apuntó y volvió a afirmar que “la señora no está desaparecida, se hace la desaparecida para ganarle el asunto que hay entre nuestras comunidades hermanas”. Luego añadió, cuando aparezca, “merece un castigo”, por el engaño. Esta persona busca protagonismo, imagen.
Dijo que el 25 d agosto de 2019, cuando el actual cabildo fue electo “los defensores del bosque”, tiraron árboles para delimitar las comunidades de San Esteban con Mier y Terán, una extensión grande y ellos mismos denunciaron diciendo que estaban saqueando el bosque.
“La última vez la vieron en Barranca del Muerto en la Ciudad de México, incluso platicó con la Secretaría de Gobernación, les dijo que no iba a volver al pueblo. Hace unos días murió su mamá, antes pedimos que fuera gente de la Fiscalía. La señora no está desaparecida, yo lo siento así, porque no es la primera vez que lo hace”.
Al respeto Ayala Ortiz dijo que son las autoridades las que deben determinar esa situación. “No podemos afirmar, pero sí exigir su presentación” y recordó que Oaxaca la desaparición de mujeres y niñas es elevada. Recordó que la primera vez Irma se tuvo que ir ella misma para salvaguardar su integridad, dado que los mecanismos no funcionan.
