Hacer visible sus entretelones contribuye el video La Duda y el texto de la autora Adiós al Futuro
Ciclo “Literatura, afectos y corporalidades” del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG UNAM).
Elda Montiel
SemMéxico, Cd. de México, 4 de diciembre 2021.- ¿Qué pensarían de tener un cuerpo distinto? ¿Qué pensarían como madres que su hijo tendrá un recorrido distinto a la heterosexualidad? ¿De un futuro incierto y que la opción es una cirugía con la complicidad de las instituciones de tercer nivel de salud para determinar la identidad por género?
Todas estas interrogantes surgen con el video “La Duda” realizado por Adiós al Futuro, la artista audiovisual y textual durante el conversatorio y presentación del libro de su autoría “Intersexual”.
Se contó con la participación de la psicóloga y especialista, investigadora en la UAM Xochimilco Eva Alcántara, con lo que culmina el ciclo “Literatura, afectos y corporalidades” del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG UNAM).
Eva Alcántara inició su participación con la proyección del video “La Duda”, ya que es un video testimonial donde se escuchan las voces de las personas intersex que nacen con características genitales, las gónadas y los patrones cromosómicos que no corresponden con las típicas nociones binarias sobre los cuerpos masculinos o femeninos.
También se escuchan las voces de las madres cuando se enfrentan a un futuro incierto, tienen la idea de que su hijo tendrán un recorrido diferente a la heterosexualidad, ven incluso que la vida de un bebe no es viable y ven la muerte del bebe como la única solución posible.
“Intersex es un término que describe una amplia gama de variaciones naturales del cuerpo”, ha dicho la investigadora que ha estudiado el tema para su tesis doctoral.
Cuestiona la práctica de las intervenciones quirúrgicas a muy temprana edad por los médicos para definir el sexo de la persona intersex: ¿porque se quiere cortar un pene si puede ser lo que abra el camino al erotismo y al placer? por lo que asegura que el sexo es algo social.
Hay que cambiar a las instituciones, las normas
Hay muchas formas de ser mujeres, hay muchas formas ser hombre, lo que hay que cambiar es a las instituciones, hoy se necesitan normas distintas. La intersexualidad demuestra que hay una gran variabilidad corporal, las personas pueden tener expresiones corporales muy diferentes.
La intersexualidad fue construida como un problema por el discurso médico en la segunda mitad del siglo XIX. Los médicos, desde entonces y hasta el día de hoy, se han abocado a describirla y tratarla en la búsqueda en el cuerpo de los límites de aquello llamado sexo, que justificara y validara el lugar en el mundo de hombres y, en especial, de mujeres.
Fuera del campo médico, cuyo enfoque rara vez detenta una mirada crítica de sus prácticas y discursos, la gente dedicada a las ciencias sociales o las humanidades que logra percibir la complejidad de este tema es poca, ha señalado la especialista en temas de la mujer al citar a Ana Aoi activista mexicana intersex.
¿En dónde estaba la intersexualidad? ¿En el lenguaje codificado del expediente clínico, en el infante que con frecuencia desconocía su diagnóstico? ¿En la mirada de los angustiados padres, en la crueldad de la respuesta social? pregunta la académica.
La historia de la intersexualidad sujeta a la presentación del sexo en el cuerpo llega a ser identificada en la actualidad como una anormalidad anatómica, una deformación. Otros autores van a hablar lo que ha ido ocurriendo una fragmentación del sexo, una categoría, una apariencia exterior del cuerpo: Formas genitales al nacimiento; cambios corporales presentados en la pubertad; potencialidad reproductiva en el cuerpo adulto; tamaño del falo y lugar donde se encuentran los orificios uretral y vaginal; presencia y morfología de los órganos reproductores internos.
Sin embargo, el sujeto no va a tener voz ni voto, la medicina va a hurgar en el cuerpo va a abrir, va a coser, va a extraer.
Eva Alcántara expresa que cuando vio el libro “Intersexual” de Adiós al Futuro quedo impactada. Justo el trabajo de Adiós al futuro, dijo, se vuelve central para abordar esta complejidad, la primera vez que alguien escucha del tema, la respuesta suele ser de perplejidad, de silencio, un poco empezar hablando de estas representaciones en conceptos particulares.
Algunas de estas variaciones se expresan y son visibles al nacer, mientras que otras se presentan gradualmente o son perceptibles en la adolescencia. Incluso pueden existir situaciones en donde las variaciones del cuerpo no revelen la presencia de diferencias físicas evidentes.
Este momento donde la intersexualidad muestra que produce fuera del expediente médico, la forma en la cual las personas interpelan eso que fue un tratamiento supuestamente a favor de su bienestar, un momento de demostrar aquí como el tema entra en el circuito de los derechos humanos, como lo hace el filósofo argentino y activista intersex y trans Mauro Cabral.
Eva Alcántara expresa que la intersexualidad muestra que no es un tema que competa a unos cuantos. La intersexualidad rompe las fronteras de la inteligibilidad del cuerpo humano, las certezas sobre la existencia de un sexo natural primario, que desplegaría en cascada una serie de conductas, formas, orientaciones y preferencias naturales. En este sentido, la intersexualidad nos habla a cada uno de nosotros, nos muestra nuestra propia ficción identitaria nos acerca a la incertidumbre de la identidad.
Podemos ver el alcancen de la experiencia intersexual, piensan que solo atañe a pocas personas, de lo que se trata es pensar la intersexualidad particularmente como van enlazándose acontecimientos en distintos niveles en América Latina, en México y en Europa.
En la actualidad es una comunidad pequeña pero sólida y tienen una posición clara de interpelación. Existen proyectos serios fundamentales “Brújula Intersexual” desde el 2013 que es un proyecto muy potente y se configura como una comunidad y un movimiento.
Las personas intersex comenzaron a interpelar el “supuesto” bien de hurgar en sus cuerpos en la infancia
Mientras que Adiós al Futuro advierte que no es un libro es una obra como artista conceptual, y visual que es el, y que fue una investigación que inicio en el 2015, que le costó mucho trabajo materializarlo como una pieza artística. Surgió la posibilidad de entablar diálogos no solo con la comunidad intersex sino a hacer alianzas con la diversidad sexual.
Al respecto indico que incluso dentro del llamado movimiento lésbico, gay, bisexual, travesti, transgénero y transexual (LGBT), que recientemente agregó la letra “I” a sus siglas, hay activistas que desconocen esta realidad. Señaló que el feminismo es muy importante ya que habla de una naturalidad de todas las posibilidades de ser.
Explicó que cuando uno no está inserto en el ambiente médico todo es un secreto, hay que guardarlo, pero desde hace 30 años las personas intersex empezamos a tener la fortaleza para enfrentar esas experiencias de la infancia, que lo que les sucedió era innecesario y tienen que lidiar con las secuelas.
Este sistema social y médico que ha estado haciéndonos pedacitos a los que nacemos con estas características visibles. Cuando nuestros cuerpos no pueden generar las categorías específicas de hombre o mujer, hay un pánico social muy fuerte. “Está muy jodido lo que hacen con nuestra infancia, porque los médicos dicen que hay que hacerlos a edad muy temprana para que no se acuerden”.
“Mi cuerpo reacciona a muchas cosas, ha sido muy azaroso por lo que es necesario mencionarlo para materializarlo”.
“Como activista, agrego, tenemos que hablar de la angustia de morir, desaparecer, que hacen que odiemos a nuestro cuerpo, que nos fue negado desde al principio negando su complejidad”.
Explico que en el Proyecto Intersex nos acercamos a médicos con una visión más abierta incluso en Guadalajara que la sociedad es muy polarizada y donde hay mucha violencia por el crimen organizado.
Finamente Adiós al Futuro precisa que usa el arte par a difundir las experiencias de la comunidad intersexual.
Eva Alcántara (foto)
Foto: Adiós al Futuro
